Educación y tecnología: un binomio todavía complejo.
Entre la utopía y la realidad.
Resulta interesante darnos cuenta que en el mundo actual, con grandes avances y descubrimientos científicos en todos los campos del saber humano, en el ámbito educativo apenas se empiece a notar una revolución en los métodos y sistemas de enseñanza. Las escuelas privadas preocupadas por ir a la vanguardia y ofrecer mejores servicios para tener más alumnos, no escatiman esfuerzos en actualizarse conforme van surgiendo innovaciones en el campo educativo; sin embargo, esto no se da en la misma medida en las escuelas públicas, y mucho menos en los países en vías de desarrollo o subdesarrollados, donde las bajas condiciones económicas de la población no les permiten acceder a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
La educación, como un aspecto fundamental en el desarrollo de los seres humanos, y por consecuencia de las sociedades, requiere de una atención especial para el logro de sus propósitos: formar seres humanos integrales –analíticos, críticos y reflexivos-, que sean capaces de enfrentar los retos que plantea esta nueva era en la que vivimos, llamada sociedad del conocimiento.
Para ello debemos reflexionar seriamente sobre la situación real sobre el aprovechamiento académico de los niños; analizar el porqué del fracaso escolar, por qué los niños no aprenden, se aburren, ya no quieren asistir a la escuela y si asisten no logran obtener los conocimientos necesarios para su formación intelectual; es importante analizar las causas por las que no se cumple con los propósitos que marcan los Planes y programas de estudios oficiales; y reflexionar si el uso de la tecnología en el aula es pertinente para lograr mejorar el proceso educativo: facilitar la enseñanza a los profesores y el aprendizaje a los alumnos.
Considero que el uso de la computadora en la escuela sí es de gran ayuda, porque permite mostrar con imágenes y sonidos; modelos y simuladores; una gran cantidad de temas, haciendo más objetiva e interesante la clase para los alumnos. Papert (1995), menciona en su libro La máquina de los niños, Replantearse la educación en la era de los ordenadores, que los video juegos han sido la vía principal de entrada de los niños en el mundo de los ordenadores y le empiezan a enseñar que algunas formas de aprendizaje son rápidas, muy atractivas y provechosas; y esto lo podemos comprobar fácilmente cuando vemos a los niños que al salir de la escuela van a un local a donde pueden jugar con videojuegos, o los que tienen mejor situación económica cuentan con sus equipos de videojuegos y se pasan hora y horas jugando con su máquinas.
¿Por qué los videojuegos resultan tan interesantes para los niños? La combinación de imágenes, sonidos y los retos que representan lograr dominar el videojuego, son algunos de los ingredientes que cautivan a los niños. ¿Por qué no darles la oportunidad de aprender de una manera similar, mediante software que presente los contenidos de aprendizaje en forma interactiva, atractiva y provechosa?.
La computadora, tal como la máquina del saber, como lo menciona el mismo Papert, ofrece a los niños la oportunidad de adquirir conocimientos y explorar un mundo mucho más rico que el que los libros impresos ofrecen; así mismo, crear un entorno en el cual todos los niños pudieran aprender álgebra y geometría, ortografía e historia de una manera más parecida al aprendizaje informal del niño no escolarizado o del niño excepcional que al proceso educativo que se sigue en las escuelas. Considero que sería ideal que esto pasara, sin embargo, siendo realistas, en nuestro país aun falta mucho camino por recorrer para que en todas las escuelas públicas se incorpore en uso de la tecnología educativa para favorecer el proceso de enseñanza aprendizaje; se han dado ya los primeros pasos en educación básico, con la introducción de recursos como Enciclomedia, en las primarias, y el pizarrón electrónico, en secundarias; pero es necesario contemplar algunos otros aspectos para lograr un uso eficiente y eficaz de la tecnología en el aula.
La computadora en el aula: un reto para el docente.
¿Por qué un reto para el docente? Simplemente porque se tiene que romper con viejos esquemas de enseñanza. Tradicionalmente, en nuestro país, la educación se ha impartido de una manera, digamos, poco atractiva para los alumnos. El docente es quien transmite el conocimiento y el alumno es el que lo recibe. Es lo que he apreciado que se da todavía en muchos de los centros educativos de nuestro entorno; y esto es algo que debe de cambiar. Creo que en esta nueva era es indispensable que cambie el rol del docente de dador de conocimientos a facilitador de aprendizajes, propiciando una participación más activa de los alumnos y motivándolos a ser los que construyan sus conocimientos a partir de la observación y el análisis de nuevos modelos, de indagación y experimentación en y con las computadoras.
Para Gallegos “La introducción de la informática en las aulas da lugar a un nuevo campo de innovación educativa y exige continuas transformaciones en profesores, alumnos, metodología, diseño curricular y la creación de software educativo y nuevos materiales”; todo esto es lo que representa un gran reto para el docente y para el sistema educativo mismo.
Si tomamos como ejemplo el caso de las escuelas primarias en donde la introducción del programa Enciclomedia requirió capacitar a los docentes en su uso, nos damos cuenta que muchos de ellos se resistieron a este cambio, incluso se puede apreciar en la página del espacio enciclomedia (http://pronap.ilce.edu.mx/enciclomedia/site/avances.htm) los avances en el seguimiento al proceso de formación docente en el uso de enciclomedia, con resultados muy desalentadores porque las cifras indican que más del 40% de los maestros que tienen enciclomedia en sus aulas no concluyeron el trayecto intermedio. El reto para el docente es, precisamente, actualizarse en el uso de las nuevas tecnologías; aprender a aprender; diseñar secuencias didácticas en las que incluya recursos como la computadora, el cañón proyector, software educativo, internet, correo electrónico, entre otros, que le permitan ofrecer a sus alumnos nuevas alternativas de aprendizaje, más interesantes, innovadoras, dinámicas y, sobre todo, que despierten en él ese deseo de aprender por sí mismo y de explorar mundos desconocidos a través de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Ante esto, me queda comentar que para los niños que han crecido con las nuevas tecnologías no es difícil manejar una computadora. La soltura con la que manejan los videojuegos, el teléfono celular, el chat, el internet, nos demuestra que no tienen problemas en usar estos recursos. Lo que nos queda por hacer a los docentes es aprovechar los conocimientos que tienen los niños en el uso de la tecnología y aprovecharlos para encausarlos a aprender por sí mismos, a indagar a descubrir, los temas o contenidos científicos que marcan nuestros programas de estudio.
Si a los niños de les deja jugar con juegos matemáticos podemos darnos cuenta que son capaces de resolver toda clase de acertijos y pasarse horas y horas intentando resolver los problemas y los retos que el juego les plantea y no descansan hasta que logran su objetivo. Así pues, démosle la bienvenida a la revolución informática en el aula.
Finalmente sólo me resta decir que debemos de aprovechar todos los recursos que estén a nuestro alcance para mejorar nuestro sistema de enseñanza y favorecer el aprendizaje en nuestros alumnos, pero no hay que olvidar que el valor de educar implica mucho más que sólo instruir o llenar cerebros de conocimientos científicos, hay que tener presente siempre que se educa con el corazón.
Entre la utopía y la realidad.
Resulta interesante darnos cuenta que en el mundo actual, con grandes avances y descubrimientos científicos en todos los campos del saber humano, en el ámbito educativo apenas se empiece a notar una revolución en los métodos y sistemas de enseñanza. Las escuelas privadas preocupadas por ir a la vanguardia y ofrecer mejores servicios para tener más alumnos, no escatiman esfuerzos en actualizarse conforme van surgiendo innovaciones en el campo educativo; sin embargo, esto no se da en la misma medida en las escuelas públicas, y mucho menos en los países en vías de desarrollo o subdesarrollados, donde las bajas condiciones económicas de la población no les permiten acceder a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
La educación, como un aspecto fundamental en el desarrollo de los seres humanos, y por consecuencia de las sociedades, requiere de una atención especial para el logro de sus propósitos: formar seres humanos integrales –analíticos, críticos y reflexivos-, que sean capaces de enfrentar los retos que plantea esta nueva era en la que vivimos, llamada sociedad del conocimiento.
Para ello debemos reflexionar seriamente sobre la situación real sobre el aprovechamiento académico de los niños; analizar el porqué del fracaso escolar, por qué los niños no aprenden, se aburren, ya no quieren asistir a la escuela y si asisten no logran obtener los conocimientos necesarios para su formación intelectual; es importante analizar las causas por las que no se cumple con los propósitos que marcan los Planes y programas de estudios oficiales; y reflexionar si el uso de la tecnología en el aula es pertinente para lograr mejorar el proceso educativo: facilitar la enseñanza a los profesores y el aprendizaje a los alumnos.
Considero que el uso de la computadora en la escuela sí es de gran ayuda, porque permite mostrar con imágenes y sonidos; modelos y simuladores; una gran cantidad de temas, haciendo más objetiva e interesante la clase para los alumnos. Papert (1995), menciona en su libro La máquina de los niños, Replantearse la educación en la era de los ordenadores, que los video juegos han sido la vía principal de entrada de los niños en el mundo de los ordenadores y le empiezan a enseñar que algunas formas de aprendizaje son rápidas, muy atractivas y provechosas; y esto lo podemos comprobar fácilmente cuando vemos a los niños que al salir de la escuela van a un local a donde pueden jugar con videojuegos, o los que tienen mejor situación económica cuentan con sus equipos de videojuegos y se pasan hora y horas jugando con su máquinas.
¿Por qué los videojuegos resultan tan interesantes para los niños? La combinación de imágenes, sonidos y los retos que representan lograr dominar el videojuego, son algunos de los ingredientes que cautivan a los niños. ¿Por qué no darles la oportunidad de aprender de una manera similar, mediante software que presente los contenidos de aprendizaje en forma interactiva, atractiva y provechosa?.
La computadora, tal como la máquina del saber, como lo menciona el mismo Papert, ofrece a los niños la oportunidad de adquirir conocimientos y explorar un mundo mucho más rico que el que los libros impresos ofrecen; así mismo, crear un entorno en el cual todos los niños pudieran aprender álgebra y geometría, ortografía e historia de una manera más parecida al aprendizaje informal del niño no escolarizado o del niño excepcional que al proceso educativo que se sigue en las escuelas. Considero que sería ideal que esto pasara, sin embargo, siendo realistas, en nuestro país aun falta mucho camino por recorrer para que en todas las escuelas públicas se incorpore en uso de la tecnología educativa para favorecer el proceso de enseñanza aprendizaje; se han dado ya los primeros pasos en educación básico, con la introducción de recursos como Enciclomedia, en las primarias, y el pizarrón electrónico, en secundarias; pero es necesario contemplar algunos otros aspectos para lograr un uso eficiente y eficaz de la tecnología en el aula.
La computadora en el aula: un reto para el docente.
¿Por qué un reto para el docente? Simplemente porque se tiene que romper con viejos esquemas de enseñanza. Tradicionalmente, en nuestro país, la educación se ha impartido de una manera, digamos, poco atractiva para los alumnos. El docente es quien transmite el conocimiento y el alumno es el que lo recibe. Es lo que he apreciado que se da todavía en muchos de los centros educativos de nuestro entorno; y esto es algo que debe de cambiar. Creo que en esta nueva era es indispensable que cambie el rol del docente de dador de conocimientos a facilitador de aprendizajes, propiciando una participación más activa de los alumnos y motivándolos a ser los que construyan sus conocimientos a partir de la observación y el análisis de nuevos modelos, de indagación y experimentación en y con las computadoras.
Para Gallegos “La introducción de la informática en las aulas da lugar a un nuevo campo de innovación educativa y exige continuas transformaciones en profesores, alumnos, metodología, diseño curricular y la creación de software educativo y nuevos materiales”; todo esto es lo que representa un gran reto para el docente y para el sistema educativo mismo.
Si tomamos como ejemplo el caso de las escuelas primarias en donde la introducción del programa Enciclomedia requirió capacitar a los docentes en su uso, nos damos cuenta que muchos de ellos se resistieron a este cambio, incluso se puede apreciar en la página del espacio enciclomedia (http://pronap.ilce.edu.mx/enciclomedia/site/avances.htm) los avances en el seguimiento al proceso de formación docente en el uso de enciclomedia, con resultados muy desalentadores porque las cifras indican que más del 40% de los maestros que tienen enciclomedia en sus aulas no concluyeron el trayecto intermedio. El reto para el docente es, precisamente, actualizarse en el uso de las nuevas tecnologías; aprender a aprender; diseñar secuencias didácticas en las que incluya recursos como la computadora, el cañón proyector, software educativo, internet, correo electrónico, entre otros, que le permitan ofrecer a sus alumnos nuevas alternativas de aprendizaje, más interesantes, innovadoras, dinámicas y, sobre todo, que despierten en él ese deseo de aprender por sí mismo y de explorar mundos desconocidos a través de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Ante esto, me queda comentar que para los niños que han crecido con las nuevas tecnologías no es difícil manejar una computadora. La soltura con la que manejan los videojuegos, el teléfono celular, el chat, el internet, nos demuestra que no tienen problemas en usar estos recursos. Lo que nos queda por hacer a los docentes es aprovechar los conocimientos que tienen los niños en el uso de la tecnología y aprovecharlos para encausarlos a aprender por sí mismos, a indagar a descubrir, los temas o contenidos científicos que marcan nuestros programas de estudio.
Si a los niños de les deja jugar con juegos matemáticos podemos darnos cuenta que son capaces de resolver toda clase de acertijos y pasarse horas y horas intentando resolver los problemas y los retos que el juego les plantea y no descansan hasta que logran su objetivo. Así pues, démosle la bienvenida a la revolución informática en el aula.
Finalmente sólo me resta decir que debemos de aprovechar todos los recursos que estén a nuestro alcance para mejorar nuestro sistema de enseñanza y favorecer el aprendizaje en nuestros alumnos, pero no hay que olvidar que el valor de educar implica mucho más que sólo instruir o llenar cerebros de conocimientos científicos, hay que tener presente siempre que se educa con el corazón.
Sandra Araceli Varela Ordorica
1º de marzo de 2008
REFERENCIAS
Gallegos, S/F, Investigación en el uso de la informática en la enseñanza, disponible en: http://148.204.224.230/dtebiblioteca/biblioteca5/B5TI05.doc en línea, (recuperado el 29-02-2008)
Papert, S. (1995). La máquina de los niños. Replantearse la educación en la era de los ordenadores. Barcelona: Paidós
http://pronap.ilce.edu.mx/enciclomedia/site/avances.htm
Gallegos, S/F, Investigación en el uso de la informática en la enseñanza, disponible en: http://148.204.224.230/dtebiblioteca/biblioteca5/B5TI05.doc en línea, (recuperado el 29-02-2008)
Papert, S. (1995). La máquina de los niños. Replantearse la educación en la era de los ordenadores. Barcelona: Paidós
http://pronap.ilce.edu.mx/enciclomedia/site/avances.htm
